La Costa del Sol suma un nuevo capítulo a su historia gastronómica. La Petite Maison, una de las casas más reconocidas de la alta cocina francesa-mediterránea, ha elegido Boho Club Marbella para su debut en España. El restaurante ha inaugurado … un pop-up exclusivo hasta el 30 de noviembre, antes de abrir su sede permanente en 2026 dentro del resort.
Con sedes en Londres, Dubái, Miami o Hong Kong, La Petite Maison ha construido un sello propio: una cocina luminosa, elegante y plagada de sabor mediterráneo. Platos con producto impecable, guiños a la Provenza y una filosofía hedonista que celebra el arte de vivir. Su llegada a Marbella refuerza la oferta gastronómica de la Milla de Oro y confirma a la ciudad como destino de referencia para las grandes marcas internacionales.
Durante estos dos meses, el restaurante ofrecerá almuerzos, cenas y experiencias a cuatro manos junto a chefs invitados —entre ellos, Dani García—, además de catas privadas, música en vivo y eventos que recrean la joie de vivre de la Riviera francesa.
Una carta entre Niza y el Mediterráneo
El menú de La Petite Maison en Marbella recupera algunos de los clásicos que han hecho célebre a la firma: la ensalada de tomate con cebolla roja y vinagreta de mostaza, el tartar de atún con aguacate y sésamo, el pollo asado marinado con limón y hierbas frescas, o el filete de ternera al Rossini. No faltan los emblemas de la casa como la ratatouille niçoise, las gambas al ajillo con aceite de oliva y chile, ni el espagueti fresco con bogavante.
En el apartado dulce, la carta mantiene el refinamiento francés con postres como la tarta fina de manzana con helado de vainilla, el mousse de chocolate caliente o la crème brûlée con flor de naranjo. La propuesta se completa con una bodega mediterránea y francesa que incluye champagnes, rosados de Provenza y vinos biodinámicos.
Con esta apertura, Boho Club reafirma su posición como enclave gastronómico de referencia. El pop-up de La Petite Maison Marbella estará abierto hasta el 30 de noviembre, una oportunidad única para saborear —por tiempo limitado— la elegancia relajada de la Costa Azul en el corazón de la Costa del Sol.
